Nada en este mundo es eterno, cierto, estable o para siempre. Ni siquiera el amor. El hombre nace, vive y muere. Capturando el momento presente, hacemos al hombre inmortal a través del arte. Recogiendo todos los amores sin hogar y haciéndolos eternos. Los versos llevan la vida a través de la danza y la música del libro, una colección poética escrita en cinco idiomas, Amores sin hogar, por la poetisa y aforista esloveno Dragica Čarna.
Las chispas de emociones entrelazadas traen diferentes voces y ecos a la música, a la danza, a la palabra hablada y a las imágenes, abarcando los diferentes puntos de vista que han existido a lo largo del tiempo. Y despiertan en nosotros todas las emociones que el hombre puede experimentar en este Universo eterno, tocando y hablando con la belleza.
Ser un amor sin hogar es sentir tristeza y vacío, nunca ser lo suficientemente bueno, lo suficientemente bello o útil o no estar en sinfonía con el mundo. Sin embargo, al mismo tiempo, un amor sin hogar busca ser perfecto, tener autoestima, rebelarse, enseñarse a sí mismo; ser Dios y Diosa; seducir con el encanto de la voz y la expresión corporal junto con aterciopeladas notas flamencas. Transmitir la magia a través de las pinturas energéticas y portales de proyecciones de luz, que ilustran el libro.
Amores sin hogar crea un lenguaje místico, un arte de curación que va más allá de la percepción física, al abrir el corazón para conectar con su ser interior. Siendo uno mismo. Amando. Soñando. Bailando. Hablando. Cantando. Luchando. Llorando. Respetando. Atreviéndose.
La danza poética esta creada por el coreógrafo y bailarín español Federico Ordoñez y la música es creación del compositor y músico belga Anthony Carrubba. Así pues, tanto la coreografía, la música como las imágenes relacionadas con los poemas tienen derechos de autor. Se trata de un concepto original creado para Amores sin hogar que encarna y expresa lo que quiere transmitir dicha poesía.
La actuación se divide en cuatro conjuntos temáticos de poemas: Poesías del Sol, de la Luna, Lilith y Venus.
Poesías del Sol son poemas sobre la autoconfianza, la voluntad de vivir, la alegría, el poder y la individualidad (poemas representados: Yo, Cuando escribo poemas, Detrás de la puerta estoy, Cambiaré los tiempos).
Poesías de la Luna son poemas sobre el alma, el corazón, la melancolía, la tristeza, el dolor, la imaginación, los sueños y las emociones (poemas representados: Déjate llevar, Oscuras imágenes de luz, Los silencios del tiempo).
Poesías de Lilith representan a la mujer rebelde, fuerte y poderosa con pasiones y obsesiones de todo tipo. Lilith es *femme fatal* que a menudo también posee energía masculina (poemas representados: Mis pasos de hombre, Poesía de Lilith, Místico).
Poesías de Venus abarcan temas como el amor, la belleza, el romance, la seducción, los placeres de la gracia y el encanto de la mujer. (poemas representados: No hay otro como tú, No me preguntes, Diosa).
La música y la danza reflejan las actitudes, sentimientos y pensamientos de estas poesías. La música flamenca conecta con el baile flamenco y contemporáneo.
Baile coreografiado e interpretado por Federico Ordoñez.
Música compuesta e interpretada por Anthony Carrubba.
Poemas escritos e interpretados por Dragica Čarna.
Ilustraciones creadas por Božidar A.Kolerič
Performance dirigida por Federico Ordoñez.